Los mejores fondos para fotografía de producto
El fondo que te resultará más práctico para la mayor parte de fotografías será el blanco. Nos da un fondo limpio, luminoso, ideal para destacar el producto, y es el fondo más fácil para recortar posteriormente, y el que mejor se adaptará a fotografía de ecommerce.
Elegir el color de fondo para la fotografía de producto
Los colores del fondo invaden al producto, por lo que si el fondo es de algún color, este se reflejará en él, y eso provocaría más trabajo de retoque. Si quieres usar fondos de colores, una opción es usar el fondo blanco, recortar el producto y luego poner el fondo de color que quieras, así respetarás la tonalidad del producto y el color solo afectará al fondo.
Fondos de colores acrílicos
Otra opción similar al fondo blanco, son los acrílicos, que te aportarán lo mismo que un fondo blanco, y además, dependiendo del tipo de acabado u opacidad, te dará un reflejo del producto, que según para cuáles, puede ser interesante. Otra ventaja es que al ser placas rígidas, no tendrás los problemas de arrugas que pueden provocar los fondos de cartulina o tela, ahora bien, vigila que no se raye. Esta opción también te permitirá iluminar a través.
Fondos oscuros
El fondo negro transmite elegancia y puedes crear efectos muy interesantes. Aporta una imagen con mucha fuerza y es perfecto para jugar con un tratamiento de la luz dura con contras que realcen al producto.
Trucos para elegir el fondo de la imagen de producto
En la fotografía de producto tipo bodegón, los fondos no tienen porque ser siempre uniformes y simples, pero el producto ha de funcionar como el centro de atención de la imagen, así pues la simplicidad es una buena regla a seguir.
Podríamos usar, madera, azulejos, mármol, piedras, acabados con textura, lo que venga a tu imaginación, hay infinidad de posibilidades.
Como consejo estético podríamos decir que en este tipo de fotografía, el conjunto en sí es lo que llamará la atención, así que es interesante procurar desenfocar el fondo para que no distraiga demasiado, así mantendrás la fuerza del conjunto, pero resaltarás el producto, que es lo que realmente importa.